Esta al frente de la dirección de Prevención y Asistencia de las Adicciones indicó que se tenga en cuenta la opción que ofrece la subsecretaría con el centro monoclínico Manantial de internación a los menores que lo soliciten.
El monoclínico Manantial está ubicado en avenida Comandante Rosales 1648 (entre Avda. Rademacher y Avda. López Torres), Posadas, teléfono 03752-458289.
Este weblog tiene como objetivo mostrar las diversas realidades que nos atraviesan en la actualidad y nos hacen pensar en un mundo dado vueltas.
Patas para arriba los valores, las modas, los sueños. Se mantienen los prejuicios, se condenan elecciones y se fomentan consumos inútiles.
Padres ausentes, grupos que te mueven en dirección a la gran boca del mercado, para ser consumidos por un sistema que cambia sus reglas sólo en base a intereses económicos.
Cómo se ve la homosexualidad en Posadas, cuál es el rito que conlleva el consumo de alcohol y drogas y cuál es la mirada de los adolescentes y jóvenes respecto del tema.
¿Qué lleva a tachar de bueno o malo una cosa y otra?
Nuestra intención no es ser un dedo apuntador de cuestiones socialmente lo bastante cuestionadas, la idea es simplemente dar a conocer, proporcionar la información que recolectamos de investigaciones, entrevistas y presentar más que conclusiones nuestras dudas y reflexiones.
La homosexualidad es una orientación sexual y se define como el comportamiento, la interacción sexual o atracción erótica hacia individuos del mismo sexo. Etimológicamente, la palabra homosexual es un híbrido del griego homo (que en realidad significa igual y que a veces se confunde con el significado latino, hombre) y del latín, lo que sugiere una relación sexual y sentimental entre personas del mismo sexo, incluido el lesbianismo. El término gay suele emplearse para referirse a los hombres homosexuales, y el término lesbiana para referirse a las mujeres.
En español, la palabra sexo (del latín sexus, y ésta del verbo secare, «cortar») tiene varios significados:
Es una dependencia con características de adicción a las bebidas alcohólicas. Su causa principal es la adicción provocada por la influencia psicosocial en el ambiente social en el que vive la persona. Se caracteriza por la constante necesidad de ingerir sustancias alcohólicas, así como por la pérdida del autocontrol, dependencia física y síndrome de abstinencia.
El alcoholismo supone un serio riesgo para la salud que a menudo conduce a la muerte como consecuencia de afecciones de tipo hepática como
En química se denomina alcohol a aquellos hidrocarburos saturados, o alcanos que contienen un grupo hidroxilo (-OH) en sustitución de un átomo de hidrógeno enlazado de forma covalente. Los alcoholes pueden ser primarios, secundarios, o terciarios, en función del número de átomos de hidrógeno sustituidos en el átomo de carbono al que se encuentran enlazado el grupo hidroxilo.
La drogodependencia o dependencia de sustancias (también denominada tradicionalmente drogadicción o toxicomanía), es la dependencia física y/o psicológica de una sustancia con capacidad de alterar un proceso biológico o químico en un organismo vivo con un propósito no nutricional. Se define como el uso continuado y abusivo de una sustancia con el propósito de obtener sensaciones placenteras (dependencia psicológica) o bien de eliminar sensaciones displacenteras como consecuencia de la supresión de su administración (dependencia física).
Una droga, fármaco o medicamento es cualquier sustancia con capacidad de alterar un proceso biológico o químico en un organismo vivo con un propósito no nutricional. Son ejemplos de sus innumerables usos, el alterar intencionalmente la conciencia, caso en el que se denomina mejor como sustancia psicoactiva; combatir una enfermedad, aumentar la resistencia física o modificar la respuesta inmunológica. Popularmente, el término droga suele utilizarse preferencialmente para referirse a las de uso ilegal y que producen psicoactividad. Para las de uso médico es más común el término fármaco, medicamento, droga medicinal o simplemente remedio.
La marihuana, al igual que el alcohol, tiene efectos depresores y las consideraciones sobre sus efectos de relajación física y mental y el sentimiento de bienestar probablemente provengan del mismo tipo de desinhibición que la producida por el alcohol. Quizá por esto algunas personas hablan de la utilidad de la marihuana para enfrentarse a la ansiedad asociada a situaciones relacionadas con la conducta sexual. La desinhibición permite obviar los prejuicios sociales y los tabúes personales.
Los efectos de expectativas y sugestionabilidad de quien la consume, lo mismo que el alcohol, pueden ser muy importantes. Un consumo persistente suele concluir con un desinterés por el sexo.
En algunos casos se informa, en mujeres, de disminución de la lubricación vaginal, lo que en ocasiones hace el coito más doloroso.
No está claro si el tabaco tiene efecto sobre el funcionamiento sexual. En algunos casos esporádicos se ha informado de jóvenes fumadores con problemas de erección y en los que el cese en la conducta de fumar produjo una rápida recuperación de su disfunción.
La asociación entre tabaco y arteriosclerosis está bien establecida, y así mismo que ésta tiene efectos importantes de menoscabo de la respuesta de erección, por lo que a largo plazo los efectos del tabaco pueden estimarse como negativos.
Uno de los aspectos que con frecuencia se constatan en la clínica es la queja de algunas personas de que el mal aliento (halitosis) de su pareja disminuye su libido o incluso llega a producir un cierto rechazo de la situación.
Los efectos de los opiáceos parecen ser más importantes.
En el hombre, alteraciones del interés sexual, retraso en la eyaculación y fracaso en la erección del Alteración en el interés sexual de la mujer.
Estos problemas, pueden ser el reflejo de la debilidad, de la depresión y del estilo de vida caótico de muchos drogadictos, con incremento de infecciones, deficiente alimentación , etc.
Las alteraciones hormonales también podrían actuar como un factor importante. Por ejemplo se ha encontrado niveles de testosterona en plasma reducidos en adictos en comparación a no adictos.
Tanto heroína como morfina parecen generar múltiples trastornos sexuales. Algunos autores comentan como el propio efecto de la acción de heroína, que los adictos señalan que es mucho mas placentero, intenso y fácil de obtener que un orgasmo (muchos manifiestan que se experimenta una sensación como de una oleada de orgasmos de una sola vez), sustituye en los adictos a la propia respuesta sexual.
Es quizá una de las sustancias que tiene más fama de ser capaz de aumentar la excitación y la respuesta sexual. Pero, si bien es cierto que se cita con frecuencia a la cocaína como un fuerte estimulante sexual, también se sabe que provoca disfunciones sexuales.
El que algunos consumidores utilicen y crean que frotar la punta del clítoris con coca aumenta la sensibilidad y excitación sexual de la mujer es sorprendente, dado el hecho de que la cocaína, en medicina, se usa como un potente anestésico local.
Sus efectos eufóricos pueden cambiar la percepción de uno mismo y de las propias experiencias o interacciones sexuales. Pero, por otra parte, tras los momentos de euforia aparece la caída a momentos de depresión.
Cuando comenzamos a indagar y pensar sobre las relaciones interpersonales, se nos vienen miles de preguntas a la cabeza, sobre todo miles de dudas. Nacen en nuestros sentimientos: resentimientos, distinciones, odios y a veces hasta el amor, que nos determina para opinar de alguna persona o de algunas situaciones en particular.
En la vida de las personas y sus relaciones existen muchos caminos, algunos son buenos y otros malos, aparecen cosas que hacen que los individuos sean de determinada manera o de otra. Malos o buenos hábitos, en realidad quien es quien para decir que es bueno o que es malo, se podría decir que es lo que no es bueno para la salud, pero de todas maneras los individuos son los que deciden que hacer de su vida.
Durante toda la historia de la humanidad han existido distorsiones que han generado formas de ver las cosas, de clasificar de determinada manera las acciones de los hombres. Tanto es así, que ser alcohólico esta mal, pero ser drogadito aun más, es juzgado de una manera superior y ni que hablar de ser homosexual. Para no ir tan lejos, una mujer que tenga relaciones sexuales con muchos hombres es sinónimo de “puta”, pero si un hombre esta con muchas mujeres es un “ganador”.
Muchas personas usan o abusan del alcohol, la droga y el sexo como salida a problemas emocionales. Problemas, tenemos todos, pero algunos son mas débiles de mete que otros. Y esa debilidad de mente aumenta si la sociedad juzga a estos individuos “vos sos esto…. Vos sos lo otro…” comienzan los martirios, estigmas sociales y presiones psicológicas que influyen hasta niveles de suicidio.
Para concentrarnos en un punto en especial varios estudios han demostrado que la homosexualidad ha existido desde el principio de la humanidad, en todas las razas, en ambos sexos, en cualquier nivel social. La homosexualidad se ha confirmado en muchas especies animales, incluidos los primates superiores. No se conocen las causas de la orientación sexual de una persona. Aunque algunas teorías apuntan a que es innata, no se conoce con exactitud el papel que juegan la herencia genética o las experiencias durante el desarrollo en la infancia, la influencia y relación con los padres, etc.
La psiquiatría incluyó inicialmente la homosexualidad entre los trastornos que podían y debían ser tratados. Los trabajos científicos de Freud, tras la llegada del psicoanálisis dieron como resultado una postura que consideraba patológicas no sólo las prácticas sino incluso la mera condición homosexual. A juicio de Freud, la homosexualidad era una manifestación de falta de desarrollo sexual y psicológico que se traducía en fijar a la persona en un comportamiento previo a la "madurez heterosexual".
Algunos estudios científicos realizados concluyeron que, analizados tanto el comportamiento como la identidad, la mayor parte de la población parece tener por lo menos alguna tendencia bisexual (atracción hacia personas tanto de uno como de otro sexo), aunque ordinariamente se prefiere un sexo u otro. Las personas que generalmente tienen una orientación heterosexual pueden sentir deseos leves u ocasionales hacia personas del mismo sexo, del mismo modo que aquellos que generalmente tienen una orientación homosexual pueden sentir deseos leves u ocasionales hacia personas del sexo opuesto.
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